Este estudio, realizado por los científicos de la Radboud University en Nijmegen, en los Países Bajos, fue publicado con “JAMA Neurology”, y en él se asegura que cuando la falta de sueño es reiterada puede llegar a ser un factor a tener en cuenta para el desarrollo de alguna enfermedad neurodegenerativa.
“Creemos que el sueño normal y saludable ayuda a reducir la cantidad de beta-amiloide en el cerebro pero cuando se perturba se altera esta disminución”, sostiene el autor del estudio Jurgen Claassen. En el caso del alzhéimer, los estudios revelan que se asocia con una acumulación de beta-amioloide, llegando a formar placas de ellas.
Las pruebas que se realizaron, en roedores, corroboró que el sueño tiene gran presencia a la hora de limpiar el cerebro de estas proteínas. Los científicos realizaron otra prueba en seres humanos para ver si el comportamiento era el mismo y lograron determinar que los hombres que durmieron bien redujeron en 6% los niveles de beta-amiloide en el líquido cefalorraquídeo, cosa que no sucedió con las personas que permanecieron despiertas.
La calidad del sueño mostró una relación con la disminución de la proteína, ello podría confirmar que el sueño realiza el mismo proceso de limpieza que en los animales. “Creemos que la beta-amiloide se elimina del cerebro o se reduce su presencia durante el sueño”, sostiene Claassen.
“Ante estos resultados y los de otros estudios, sería bueno que se vigilaran los problemas de sueño, aunque tampoco hay que asustarse por no dormir bien una única noche o pasarla en vela”, recalcó el investigador.
Además el especialista aseguró que este estudio no demuestra que dormir bien sea una forma de prevenir el alzhéimer, o que la acumulación de beta-amiloide derive en la aparición de enfermedades.
Fuente: ABC
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